Creo, luego existes…
Creer o no creer that´s the fucking cuestion…
Hace cientos de años, en plena edad media, la gente normal tenía la certeza y la plena confianza en una indiscutible realidad: la tierra era plana.
Todos sabíamos que, al final del horizonte había un inconmensurable despeñadero hacia el vacío, hacia el abismo de fuego, hacia el infierno…
Nadie ha vuelto de esas latitudes, nadie podría atestiguar qué hay al otro lado del mar; como tampoco nadie ha estado al otro extremo del universo, o de la vida…
Más atrás -aún- en esa misma dirección del tiempo; los buenos ciudadanos del reino, respetaban obedientísimamente el hecho de que, el sol giraba en torno a la tierra…
Nadie ha vuelto de esas latitudes, nadie podría atestiguar qué hay al otro lado del mar, nadie -hoy- ha estado al otro extremo del universo o la vida terrena…
Todos estábamos de acuerdo en que el Sol, la lumbrera del día, rotaría día a día a nuestro alrededor
(no podía ser de otra forma… )
-Es la fuerza magnética de la tierra la que atrae el sol hacia ella, habían dicho los grandes científicos con sus números comprobados y de acuerdo a las leyes…
(o los epiciclos ecuantes y deferentes contenidos en el Almagesto…)
Somos el centro del universo, el único planeta habitado entre los cientos de miles de millones de galaxias… Seguimos creyendo -hoy- con la mente fósil de hace cientos de cientos de años…
¿ No puede haber vida después de Plutón o Alfa Centauro… ?
Somos el único planeta habitado y, -ergo- sólo existe nuestra realidad: humana…
Humana demasiado humana -como diría F. Nietzche.
Lo demás, sólo son típicas fantasías, utopías pretenciosas o evanescentes delirios de poetas errantes, marineros extraviados, o simplemente: locos de atar…
(…)
Creer o no creer, no es la opción de una mente que se abre al universo…
Creer o crear: -Sí.
En mil años más, cuando la gente recuerde nuestra época como una segunda edad media, -oscurecida por la incertidumbre y la ignorancia, tétrica de dominaciones y horrorosa de suavizada esclavitud contaminante- seguramente, reirán incrédulos ante el relato de nuestras vidas, tal como para nosotros es risible hablar de una tierra plana en torno a la que viene a girar el sol todos los días…
Reirán y especularán acerca de cómo la gente vivía en esta época, cuando todavía no se manifestaban completamente los habitantes de otros planetas o no se había descubierto la manera de entrar y salir (en carne y hueso) de los universos paralelos.
¡Creer y crear!
Sólo cruzando el mar del miedo se puede descubrir los nuevos mundos de la creación…