Este libro no tiene prólogo porque la vida tampoco lo tiene; y cuando uno espera comenzar la lectura se da cuenta que ya está adentro, como cuando se toma consciencia de sí mismo y se comprueba que ya se venía recorriendo el camino… Tal vez como una metáfora de la guerra sicológica, -que se libra desde antes y adentro- para inaugurar la lectura.
La impresión es austera, lejos de los diseños cuidados y la apariencia comercial. La tipografía es justa y dura como el día a día de quienes deciden transformarse en sí mismos y asumir con su libertad.
Áspero y difícil. KARMAGEDÓN Mental War, es un libro escrito a contracorriente, con múltiples lecturas, en alto contraste de luces y sombras, que desafía al lector a través de una mayéutica –como la de Anton Mesmer- o la de Sócrates, uno de los personajes, acaso el protagonista (?) con el objetivo de definir –en un combate pactado en cuatro libros- quién termina con quién, el lector con el texto o el texto con el lector…